El Programa Padrinos de la UNL funciona desde el año 2003, y desde entonces ha cultivado un estrecho vínculo con empresas y organismos públicos de la región. Convertirse en Padrino de la UNL otorga beneficios a las empresas e instituciones, quienes podrán contar con la asociación del nombre de su empresa a la de la Universidad, y contar con diversos beneficios. La colaboración de los Padrinos consiste en un aporte económico mensual que tiene el carácter legal de donación y se deduce de la base imponible del impuesto a las ganancias en su totalidad. Estos fondos se destinan a la mejora de la calidad educativa, así como de los recursos edilicios, materiales y humanos.