Yvy Marane’y

Pablo Affore Lovino

EL ORDEN DE LA CREACIÓN

Dibujos, pinturas, cerámicas, intervenciones, instalaciones y videos son los múltiples soportes que presenta Pablo Affore Lovino para representar sus acciones visuales. Todas sus obras se relacionan entre sí en una unidad continua, en un orden oculto implícito, que aporta un flujo de información visual paulatino y constante. Como en una red, cada parte o fragmento es una totalidad común que abarca la extensión de un movimiento regular y permanente.

Se da en la obra de Affore una tendencia observable y directa, la ejecución de configuraciones simples y por consiguiente de órdenes creativos regulares, casi emparentados con el efecto de las limaduras de hierro esparcidas en un campo magnético que se ordenan siguiendo un patrón en esa fuerza de atracción que lo abarca todo.

Su entorno es su obra, Affore relaciona todos los elementos a su alcance y los ubica en otra espacialidad que la original de donde surgieron, pero igualmente intenso en su potencialidad y tan cargado de energía como en su identidad primaria. Así organismos retirados de los bordes de ríos, de algún monte lejano, o de la ladera de una montaña, aparecen aquí para “ser”, en otro acontecimiento temporal, una instancia expresiva, en una espacialidad nueva, con su carga simbólica adherida a fuego en sus regulares ritmos orgánicos. Aquí es donde surgen las acciones reflejas, un logro de la propia energía que tienen los objetos y que el artista descifra a pleno en cada obra.

Se acoplan también los ritmos progresivos de la repetición, esa casi frenética acción para componer, que no elude la insistencia en pos de los efectos y correlaciones de vínculos que pretende Affore.

Así podemos ver en las obras, que tienen cientos de clavos adheridos a su superficie, el intrincado patrón visual que se produce a partir de un simple elemento, las logradas tramas ópticas se acomodan a nuestra visualidad dando movimientos constitutivos de matices y vaivenes que dominan la escena desde lo conceptual.

Las alteraciones nos hacen atender a un ritmo, a sortear los obstáculos visuales, a percibir las variaciones en esa clara “central energética” que nos propone el artista en cada una de sus puestas.

De este modo en el recorrido completo, uno encuentra evidencias simbólicas a cada paso y nuevas formas de alterar las luces y sombras, de crear contrastes, de organizar las imágenes, de componer con sonoridad propia.

Esta manera de construir sin jerarquías, ya que todos los soportes con que trabaja tienen la misma importancia, hace que nos enfoquemos en los estímulos visuales, en el logro desde elementos mínimos, en las variaciones de lo simple.

Las obras de este artista son verdaderos “campos de fuerza” con posibilidades y significaciones puestas en juego, que harán a la recuperación de sensaciones y percepciones que todos tenemos, cuando se trata de los elementos que las componen. La naturaleza destinada a funcionar como vivas relaciones y recuperadas energías en nuevos formatos, hará que nos retrotraigamos a la experiencia directa con ella.

Además hay una obra que se constituye en “bioarte” por la utilización de vello púbico en el centro de su construcción, es una forma cruciforme axial que adquiere un tono especial por el material orgánico agregado, que pertenece a diferentes personas, y se unen aquí en esta simetría imposible, logrando un nuevo significado en la danza ritual de este círculo mágico que apela a partes de la corporeidad humana para constituirse en un hecho plástico, así como al asomo de un delicado erotismo que transgrede casi con humor, su discurso conceptual.

Alude también a lo irónico con los mates calabazas que transmiten lo voluptuoso desde sus curvas sensuales en una decidida elección por lo orgánico para componer sus obras.

Muchos indicios, cantidad de estímulos, simples elementos, podrían resumir el cosmos de este artista que devuelve al universo natural su aporte de cerámicas esparciendo, abandonando, enterrando o arrojando sus discos para que el orden creativo vuelva a producirse una y otra vez.

Lic. Stella Arber

Directora MAC UNL

 

[Video de la muestra]