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En 1833 llegó a Santa Fe un británico desconocido con gesto de curiosidad. Hoy, 176 años después, la Universidad Nacional del Litoral (UNL) homenajeó a aquel joven llamado Charles Darwin, en su año y recordando su paso por estas tierras.
Más de 500 alumnos de escuelas primarias y secundarias participaron de la jornada “Darwin en Santa Fe”. El itinerario incluyó charlas, talleres en la Reserva Ecológica para los más chicos y dos muestras fotográficas instaladas. Todo para reconstruir los pasos del más famoso naturalista que dejó sus impresiones sobre nuestra región en “Diario de un viaje de un naturalista alrededor del mundo”.
Del paso del autor del “Origen de las especies” sólo quedan las impresiones que él mismo dejó en su diario y no se halla registro alguno en los museos o archivos locales, según contó Alba Imhof, directora de la carrera de Biodiversidad de la FHUC de la UNL en la charla “¿Quién fue Charles Darwin? Homenaje a un naturalista”.
“Por sus propias palabras sabemos que su salud no fue buena en Santa Fe y que, de los tres días que estuvo, dos recibió ayuda y remedios caseros para enfrentar sus males”.
“Durante este tiempo fue tan escasa la lluvia caída que no crecieron plantas, ni siquiera cardos y todo el país tomó el aspecto de un polvoriento camino carretero”, es algo pudo haberse escrito durante este 2009. Pero no, forma parte de la descripción que hizo Darwin de lo que vio en territorio santafesino.

Más que un biólogo
“Era vago para estudiar y abandonó Medicina para seguir la carrera de Teología”, delató Imhof en su presentación. Resulta que uno de los personajes más relevantes de la historia de la ciencia moderna no era muy afín al estudio. De todos modos, su trabajo como naturalista aficionado junto con la oportunidad que tuvo de dar la vuelta la mundo en el Beagle para hacer un relevamiento estratégico para la corona británica le permitieron hacer valiosos aportes no sólo al conocimiento biológico sino también ecológico y geológico.
"De Buenos Aires a Santa Fe: lo que vio Darwin en nuestro suelo", fue la otra charla que se brindó a los chicos y estuvo a cargo de los geólogos Martín Iriondo y Daniela Krohling de la FICH de la UNL. En esa ocasión los expertos recalcaron la importancia que tuvo la etapa geológica en su pensamiento y cómo la posibilidad de pensar en otra escala temporal mucho más grande lo impulsó a elaborar la teoría de la evolución.

De los más chicos
En la Reserva Ecológica se realizó también un taller llamado “Jugando a ser Darwin” donde los chicos tuvieron oportunidad de reconocer la tarea del naturalista. A su vez, se presentó la “EsCiencia, grandes preguntas pensadas por chicos”, editada por la Escuela Primaria de la UNL. Se trata de una publicación elaborada por los terceros grados de la institución y que dedica su primer número a Darwin.

Para visitar
En el Octógono de la FADU-FHUC (Ciudad Universitaria) quedaron inauguradas las muestras fotográficas “Darwin en Argentina”, producida por el Centro Cultural Borges de Buenos Aires, y “Tiempo Cero: Extinciones”, perteneciente al Museo de Ciencias Naturales Dr. Ángel Gallardo de Rosario (gentileza del Museo Provincial de Ciencias Naturales “Florentino Ameghino” de la ciudad de Santa Fe). Abiertas al público general, podrán visitarse hasta el 17 de octubre.