Después de la inundación
Solidaridad nacional en pos de la cultura
Lunes 15 de septiembre de 2003
En la UNL ya se recibieron más de 20.000 libros. Fueron donados por instituciones y entidades de todo el país. Los destinatarios son maestros, escuelas y bibliotecas populares afectadas por la emergencia hídrica.
“El sábado 3 de mayo, a cinco días del comienzo de la inundación, en un programa de LT10 escuchamos el relato de las pérdidas sufridas por la Biblioteca “Padre Luis Quiroga” del Servicio de Educación Popular del Barrio Santa Rosa de Lima, al mismo tiempo que los responsables de la Casa de la Cultura Indo Afro Americana daban cuenta del material discográfico y bibliográfico que les había quedado bajo el agua. Comenzamos el mismo domingo 4 con una campaña para recuperar estas bibliotecas”, empieza explicando un informe elaborado por la Dirección de Cultura de la UNL sobre su labor en la inundación del río Salado.
Así, el primer objetivo planteado fue el rescate de bibliotecas populares, públicas y privadas, afectadas por la inundación. Para no superponer tareas con los organismos gubernamentales provinciales, la Dirección de Cultura puso en funcionamiento una campaña fuera de la ciudad, convocando a las universidades nacionales de Buenos Aires, Cuyo y Córdoba como así también a los organismos oficiales y particulares de numerosas ciudades argentinas. La respuesta fue inmediata: la Dirección General del Libro y Promoción de la Lectura de la Secretaria de Cultura de la ciudad de Buenos Aires envió más de 10.000 libros. Por su parte, el Coro de la UNL colaboró desarrollando conciertos solidarios con impacto en todo el país, y a partir de los cuales se recogieron gran cantidad de ejemplares bibliográficos y material fonográfico.
El trabajo no finalizó allí, una vez recibido el material debió ser seleccionado y clasificado a partir de numerosas variables (disciplinas, niveles educativos, tipo de biblioteca, entre otras), para lo cual se recibió la ayuda del personal de la Biblioteca Pública y Popular “Dr. José Galvez”, que trabajaron de manera “altamente eficiente y comprometida”, según continúa el informe de la Dirección de Cultura.
Esta primera campaña está llegando a su fin con más de 13.000 libros que fueron donados a bibliotecas, escuelas y docentes universitarios. “Por su parte –añade el informe–, aún están en camino 3.600 ejemplares más que envío la Biblioteca Nacional y gran cantidad de ejemplares que vienen desde la Universidad Nacional de Córdoba”.
Gracias a las gestiones realizadas por la Fundación Diario La Nación, la campaña contó con el aporte de once editoriales nacionales: Troquel, Sudamericana, Kapeluz, Aique, Kel, Santillanan, Planeta, Paidós, Estrada, El Ateneo y Puerto de Palos. Por su parte el diario El Litoral actuó como difusor local, receptor de los envíos desde Buenos Aires y de cartas de aliento que alumnos y docentes envían a sus compañeros afectados.
En dos meses que duró esta campaña, los profesores y maestros de Santa Fe ya han recibido cerca de 6.000 libros –la mayoría de ellos sin uso y de alto valor en el mercado– y más de 900 cartas de apoyo.
La UNL, encargada de la clasificación y distribución del material, contó con la colaborción de alumnas de la carrera de Bibliotecología del Instituto Superior Nro.12 Gustavo M. Zuviría durante dos semanas, y cuatro pasantes de la Escuela de Enseñanza Media “Dante Alighieri”.
A pesar de que el cierre definitivo de tareas esta previsto para mediados de septiembre, las autoridades de la Dirección de Cultura de la UNL aclararon que “seguiremos trabajando en la campaña mientras continuemos recibiendo material, ya que la inundación trasciende el hecho fáctico de la crecida del río, las consecuencias pueden prolongarse en el tiempo y agudizar aún más la precariedad de las situaciones generadas por ella”.
Así, el primer objetivo planteado fue el rescate de bibliotecas populares, públicas y privadas, afectadas por la inundación. Para no superponer tareas con los organismos gubernamentales provinciales, la Dirección de Cultura puso en funcionamiento una campaña fuera de la ciudad, convocando a las universidades nacionales de Buenos Aires, Cuyo y Córdoba como así también a los organismos oficiales y particulares de numerosas ciudades argentinas. La respuesta fue inmediata: la Dirección General del Libro y Promoción de la Lectura de la Secretaria de Cultura de la ciudad de Buenos Aires envió más de 10.000 libros. Por su parte, el Coro de la UNL colaboró desarrollando conciertos solidarios con impacto en todo el país, y a partir de los cuales se recogieron gran cantidad de ejemplares bibliográficos y material fonográfico.
El trabajo no finalizó allí, una vez recibido el material debió ser seleccionado y clasificado a partir de numerosas variables (disciplinas, niveles educativos, tipo de biblioteca, entre otras), para lo cual se recibió la ayuda del personal de la Biblioteca Pública y Popular “Dr. José Galvez”, que trabajaron de manera “altamente eficiente y comprometida”, según continúa el informe de la Dirección de Cultura.
Esta primera campaña está llegando a su fin con más de 13.000 libros que fueron donados a bibliotecas, escuelas y docentes universitarios. “Por su parte –añade el informe–, aún están en camino 3.600 ejemplares más que envío la Biblioteca Nacional y gran cantidad de ejemplares que vienen desde la Universidad Nacional de Córdoba”.
Campaña nacional
A partir de una iniciativa conjunta de la UNL, la Fundación Diario La Nación, diario El Litoral y Cable y Diario, Correo Argentino y Fundación Leer, se puso en marcha un segundo proyecto denominado “Un libro para un maestro”, esta vez destinado exclusivamente a recolectar ejemplares para los docentes de la EGB y del Polimodal afectados por la inundación.Gracias a las gestiones realizadas por la Fundación Diario La Nación, la campaña contó con el aporte de once editoriales nacionales: Troquel, Sudamericana, Kapeluz, Aique, Kel, Santillanan, Planeta, Paidós, Estrada, El Ateneo y Puerto de Palos. Por su parte el diario El Litoral actuó como difusor local, receptor de los envíos desde Buenos Aires y de cartas de aliento que alumnos y docentes envían a sus compañeros afectados.
En dos meses que duró esta campaña, los profesores y maestros de Santa Fe ya han recibido cerca de 6.000 libros –la mayoría de ellos sin uso y de alto valor en el mercado– y más de 900 cartas de apoyo.
La UNL, encargada de la clasificación y distribución del material, contó con la colaborción de alumnas de la carrera de Bibliotecología del Instituto Superior Nro.12 Gustavo M. Zuviría durante dos semanas, y cuatro pasantes de la Escuela de Enseñanza Media “Dante Alighieri”.
A pesar de que el cierre definitivo de tareas esta previsto para mediados de septiembre, las autoridades de la Dirección de Cultura de la UNL aclararon que “seguiremos trabajando en la campaña mientras continuemos recibiendo material, ya que la inundación trasciende el hecho fáctico de la crecida del río, las consecuencias pueden prolongarse en el tiempo y agudizar aún más la precariedad de las situaciones generadas por ella”.