Economía

Una visión económica de los tambos argentinos

Miércoles 10 de agosto de 2016 / Actualizado el miércoles 17 de agosto de 2016

Desde FCE, los miembros de IECAL realizan investigaciones sobre los problemas de la región, entre ellos la industria lechera. En este sentido se estudia todo el proceso y los factores que impactan sobre la competitividad de las cadenas productivas.

El Instituto de Economía Aplicada del Litoral (IECAL), que funciona dentro de la Facultad de Ciencias Económicas (FCE) de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) centra sus principales líneas de investigación en estudios económicos aplicados a problemas específicos de la región, entre los que se encuentra la situación de los tambos y la industria lechera en Argentina y, fundamentalmente, Santa Fe.  En cuanto a sus miembros, el instituto está formado por la directora Edith Depetris de Guiguet; cinco miembros plenos: Gustavo Rossini, Rodrigo García Arancibia, Jimena Vicentin Masaro, Mariano Coronel y dos becarios: Ana Laura Chara y Luciano Russo.

Los estudios que se realizan desde el IECAL están enfocados en la estructura y comportamiento de la cadena productiva, desde la tranquera del campo hasta el consumidor final, y en este sentido, analizan la oferta y la demanda, los mercados y los precios, como así también los factores que impactan sobre la competitividad. Edith Depetris de Guiguet comenta que los trabajos “no son coyunturales del momento, sino estructurales, centrándonos en cómo se comporta la producción en general en un período de análisis para ver cómo se comportan las variables a lo largo de los años y lo que sucede hoy es solo un punto en nuestro estudio”.

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Datos e incentivos

Consultados sobre la situación actual, los miembros del Instituto coincidieron que en la actualidad, los precios cayeron como nunca antes lo habían hecho desde enero de 2011. Si bien los factores que influyen son múltiples, se destaca la falta de inversiones producto de la falta de incentivo durante los últimos años, lo que implica al mismo tiempo una baja expectativa del productor, factor muy importante en economía. A todo esto se suma la estación del año, ya que en invierno baja la producción y las cuestiones climáticas agravaron la situación, “la falta de infraestructura fue terrible en el mes de abril con tantas lluvias, no tener caminos para la lechería no solo hizo difícil sacar la producción sino que también las familias quedaron totalmente aisladas y esto es una cuestión inconcebible en plena Pampa Húmeda” enfatizó Depetris.

Sin embargo, desde el IECAL manifiestan la dificultad que se encuentran al momento de analizar el comportamiento del sector ya que no tiene ningún dato básico de los últimos tres años porque "desaparecieron del INDEC, y lo que complica todo esto es que cuando se sacan índices son generales pero tenemos mucha diferencia en tamaños de tambos y esto es muy condicionante para la eficiencia”, explica Depetris, mientras que García Arancibia considera que “sería importante que el sector lácteo tenga su propia información de índice de precios de costos de insumos y salarios en la cadena productiva, no solo en tambo sino también en la industria, en los supermercados, porque eso ayuda a transparentar las relaciones de la cadena; de está forma podemos ver cómo se mueven los precios en los distintos factores y cómo podemos negociar entre todos los eslabones”.

Por otro lado, “la caída del precio internacional ha afectado mucho, no solo a Argentina, también a otros países importantes como Nueva Zelanda y Australia, que han tenido un gran impacto” reflexiona la directora; Gustavo Rossini agrega que “la leche va a mercado interno o a exportación y los precios de exportación están muy bajos lo cual se traslada hacia los precios de producción”. En tanto, Jimena Visentin Massaro explica que “de la totalidad de lo que se produce en leche, el 20 o 30 por ciento se exporta, pero los precios internacionales influyen mucho en lo que se paga al productor”.

En este contexto, muchas veces se sustituyen las actividades en el campo para tener rentabilidad, lo que lleva al cierre de tambos. Una de las actividades que sobresalen es la siembra de soja “cuando falta incentivo en una producción y estás en La Pampa Húmeda donde podés sustituir una producción por otra lo haces, y esto viene ocurriendo desde hace años”, cuenta Depetris. En el mismo sentido, Rossini recalca que “la soja viene avanzando sobre tambos y sobre la ganadería misma, por motivos económicos pero también porque el tambo exige vivir en los campos y hoy en día muchos se han mudado a los pueblos o ciudades por la falta de infraestructura, por la inseguridad”.

Precios dispares

Consultados sobre la diferencia de precios en toda la cadena productiva, Rodrigo García Arancibia detalla que “es importante conocer los procesos por los que pasa la leche hasta llegar a las góndolas, ya que son muchos los pasos y son muy altos los costos”, Visentín Massaro agrega que “cada agente de la cadena tiene una visión parcializada de lo que sucede en la producción de precios, y la realidad es que la industria también se ve afectada y ajustada, y también hay un desconocimiento de la tecnología empleada a lo largo de la cadena productiva y que hacen al precio”.

En los últimos días, diferentes entidades productivas presentaron un proyecto para encontrar una solución a largo plazo centrado en la formación de pooles productivos, sin embargo Depetris considera que es muy difícil ya que “la cuestión institucional en Argentina está muy fragmentada y los productores no tienen una única entidad que los represente, que puedan ser una sola voz y es muy difícil coordinar de esta manera; las situaciones son urgentes y el productor necesita una solución urgente. No es fácil pensar en un pool de todo el país porque tenemos muchísimas diferencias a nivel regional, creo que es un salto muy grande y no lo veo factible en el corto plazo”.

 

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