Internacionalización
Cinco doctorandos de la UNL viajaron a Italia
Martes 9 de diciembre de 2003
Fueron en el marco del Doctorado conjunto en Biotecnología entre la UNL y la Universidad Federico II de Nápoles. Los estudiantes fueron acompañados por un grupo de académicos locales. Zeltek, la empresa incubada en la Facultad de Bioquímica, recibió numerosos
Entre el 23 y 29 de octubre pasados se llevó a cabo en la ciudad de Nápoles (Italia) la segunda actividad coordinada entre la Universidad Nacional del Litoral (UNL) y la Universidad Federico II de la ciudad del sur de Italia. El motivo de reunión fue el Doctorado conjunto en Biotecnología que comparten ambas casas de altos estudios, cuyo objetivo primordial es la integración de Argentina e Italia en los aspectos educativo y cultural.
La reunión celebrada en Nápoles, es el segundo encuentro luego de casi una década de trabajo. En 1990, la Facultad de Ingeniería Química (FIQ) de la UNL invitó a tres profesores de la universidad italiana, y a partir de allí se generó un vínculo que derivó en un primer encuentro realizado en noviembre de 2002 en Santa Fe, en la UNL.
La comitiva argentina que viajó a Europa estuvo integrada por el rector de la UNL, Ing. Mario Barletta, por los profesores Juan Carlos Basílico, Ricardo Kratje, Jorge Reinhermer, Marina Etcheverrigaray y María de la Luz Zapata, y por los cinco doctorandos Carolina Didier, María Luján Capra, Carina Bergamini, Romina Zuqueli y Diego Mercanti viajó en representación de la UNL.
El encuentro tuvo seis jornadas de disertaciones. En la primera, el Prof. Genaro Marino –secretario de Asuntos Internacionales de la universidad italiana–, el Dr. Giovanni Zaniel –coordinador italiano del Doctorado–, y Barletta dieron inicio al encuentro. Por su parte, los doctorandos hicieron sus presentaciones basadas en los informes de avances de sus trabajos de tesis, mientras que los profesores que asistieron disertaron sobre sus temáticas específicas de trabajo, entre ellas, la glicocilación de proteínas y la purificación de los fármacos, los probióticos y el tema de micotoxinas, entre otros.
“Los italianos se sorprendieron de que en una universidad pública inmersa en un sistema tan golpeado como el nuestro, tuviéramos productos transferidos ya a la industria, cuestión que ellos están desarrollando”, afirmó Etcheverrigaray. “Tecnológicamente hablando, Argentina necesita de estos aportes, porque tenemos oportunidades que no hay en otros países. A los italianos les resulta difícil encontrar esos espacios porque están en el primer mundo y las oportunidades son mucho menores”, sintetizó Kratje. Por su parte, Reinheimer explicó que “en general a ellos les impresionó gratamente el acercamiento que hay entre los grupos de investigación de la universidad y la industria. Tenemos una vinculación muy fuerte que a ellos los intriga porque en su país el grado de relación no es el mismo”.
Los académicos acordaron seguir trabajando para afianzar la relación entre las dos instituciones, para lo cual, el rector de la Federico II se comprometió a venir a Santa Fe en 2004.
La reunión celebrada en Nápoles, es el segundo encuentro luego de casi una década de trabajo. En 1990, la Facultad de Ingeniería Química (FIQ) de la UNL invitó a tres profesores de la universidad italiana, y a partir de allí se generó un vínculo que derivó en un primer encuentro realizado en noviembre de 2002 en Santa Fe, en la UNL.
La comitiva argentina que viajó a Europa estuvo integrada por el rector de la UNL, Ing. Mario Barletta, por los profesores Juan Carlos Basílico, Ricardo Kratje, Jorge Reinhermer, Marina Etcheverrigaray y María de la Luz Zapata, y por los cinco doctorandos Carolina Didier, María Luján Capra, Carina Bergamini, Romina Zuqueli y Diego Mercanti viajó en representación de la UNL.
Sobre el doctorado
“Además del título al que pueden acceder los doctorandos de ambos países, para nuestros estudiantes es importante lograr un título que los habilita en toda la comunidad europea”, explicó Juan Carlos Basílico, secretario Académico y vicedirector del Departamento de Ingeniería en Alimentos de la FIQ y coordinador del grupo.El encuentro tuvo seis jornadas de disertaciones. En la primera, el Prof. Genaro Marino –secretario de Asuntos Internacionales de la universidad italiana–, el Dr. Giovanni Zaniel –coordinador italiano del Doctorado–, y Barletta dieron inicio al encuentro. Por su parte, los doctorandos hicieron sus presentaciones basadas en los informes de avances de sus trabajos de tesis, mientras que los profesores que asistieron disertaron sobre sus temáticas específicas de trabajo, entre ellas, la glicocilación de proteínas y la purificación de los fármacos, los probióticos y el tema de micotoxinas, entre otros.
Buena impresión
Uno de los temas sobresalientes del encuentro fue la presentación de Zeltek SRL, el laboratorio incubado en la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas.“Los italianos se sorprendieron de que en una universidad pública inmersa en un sistema tan golpeado como el nuestro, tuviéramos productos transferidos ya a la industria, cuestión que ellos están desarrollando”, afirmó Etcheverrigaray. “Tecnológicamente hablando, Argentina necesita de estos aportes, porque tenemos oportunidades que no hay en otros países. A los italianos les resulta difícil encontrar esos espacios porque están en el primer mundo y las oportunidades son mucho menores”, sintetizó Kratje. Por su parte, Reinheimer explicó que “en general a ellos les impresionó gratamente el acercamiento que hay entre los grupos de investigación de la universidad y la industria. Tenemos una vinculación muy fuerte que a ellos los intriga porque en su país el grado de relación no es el mismo”.
Visión de futuro
Consultado por el futuro del doctorado conjunto, Barletta expresó que “estuvimos trabajando con nuestros pares italianos y estamos pensando en ampliar la integración que ya existe entre ambas universidades a otras áreas del conocimiento”. En tal sentido, el rector amplió que “estuvimos evaluando la posibilidad de trabajar un proyecto conjunto entre la UNL, la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) y la Universidad Federico II de Nápoles, es decir generar en la región centro del país una presencia de esta universidad para poder llevar adelante proyectos de formación de recursos humanos y articulación científica entre las universidades”.Los académicos acordaron seguir trabajando para afianzar la relación entre las dos instituciones, para lo cual, el rector de la Federico II se comprometió a venir a Santa Fe en 2004.