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El premio de la Sociedad Argentina de Catálisis al Joven Investigador quedó en manos de la Dra. Melisa Paola Bertero, becaria posdoctoral del Instituto de Investigación en Catálisis y Petroquímica (INCAPE) de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) y el Conicet.
La distinción, que se entrega cada dos años y premia tesis doctorales vinculadas con el campo de la catálisis, reconoció el trabajo de Bertero y el equipo del Incape sobre procesamiento catalítico de bio-oils para su uso como fuente energética y de materias primas. 
“Premiaron la originalidad, la consistencia de los resultados y el impacto de la investigación”, indicó Bertero. “Lo importante fue que trabajamos con  bio-oils derivados de la pirólisis de biomasa lignocelulósica, algo que se descarta, se quema generalmente; lo transformamos en líquido y lo convertimos en combustibles de transporte sobre un catalizador comercial. No tuvimos que desarrollar ningún proceso adicional sino que estudiamos qué pasa si reemplazamos una parte de petróleo por este residuo en la refinería”.
 
Experiencia pionera
La experiencia no sólo fue novedosa por el producto elegido para investigar sino que también fue pionera en la técnica experimental aplicada. “Usamos el reactor Simulador de Riser CREC, del cual sólo hay cuatro unidades en el mundo, para una aplicación distinta: introdujimos un producto distinto a los derivados petroleros. Esa fue la parte experimental de laboratorio distinta o llamativa porque nadie ha usado este reactor para analizar este tipo de residuos”.
La investigación comenzó en 2007 cuando Ulises Sedrán, director de tesis de Bertero y actual director del Incape, le sugirió el tema para investigar durante su doctorado. “Los primeros dos años fueron durísimos porque teníamos que lograr identificar qué había dentro del liquido que íbamos a meter en el reactor. Después ya la investigación se encaminó, aunque no fue sencillo; era un trabajo más orientado”.
Como parte del premio, el trabajo de Bertero fue presentado como conferencia plenaria del Congreso Argentino de Catálisis que se realizó en San Luis la semana pasada. Sin embargo, parte de los resultados ya fueron divulgados en siete papers que la investigadora fue publicando a lo largo de los años como becaria doctoral primero y ahora completando su pos doctorado y también en 19 congresos. “Al tema lo voy a seguir trabajando mucho más”, indica. “Me costó tanto trabajo que no lo voy a dejar”.

El futuro de su investigación
La investigación tiene un alto potencial para la industria y el paso lógico es encontrar alguna manera de aplicar estos resultados de manera concreta. Según Bertero, si bien esto es posible, todavía lo ve como lejano. “Para convencer a los refinadores de que hagan esto, falta. Tenemos que seguir estudiándolo, hicimos la primera parte. Ahora seguimos trabajando en diferentes condiciones de proceso, tratando de mejorar lo que ya obtuvimos pero todavía estamos en la parte académica”.
Contenta por el reconocimiento de su trabajo y los logros de sus investigaciones, Bertero avanza también en su carrera científica y está a la espera de que se concrete el ingreso como investigadora de Conicet en los próximos meses. “Empecé de cero en el Incape y estos logros son parte de un trabajo en equipo que se pudo concretar con la ayuda de todos en el instituto y también de Conicet, que creyó en mi proyecto y me dieron mucha confianza”.