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En el marco del Día de la Paz en Angola, que se celebró el 4 de abril en conmemoración del 14 aniversario de la firma del acuerdo que puso fin a la guerra civil en ese país africano, seis jóvenes angolanos brindaron una charla sobre este tema en la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas (FICH) de la Universidad Nacional del Litoral (UNL).

Estos profesionales se están capacitando en la FICH, en el marco de un convenio de cooperación entre la UNL y la Universidad José Eduardo Dos Santos (UJES), para ejercer como docentes de la Licenciatura en Ingeniería de los Recursos Hídricos, carrera única de su tipo en dicho país africano que comenzó a dictarse en 2014  en la Escuela Superior Politécnica de Bié (ESPB), con un plan de estudios diseñado por docentes de la FICH, a la medida de las necesidades de Angola y en un trabajo coordinado con dicha la ESPB. 

“Es un convenio muy importante para la Universidad, entre otras razones porque es la primera vez que la UNL desarrolla en Angola una iniciativa que consiste en implementar una carrera ligada a una disciplina señera en esta casa, como es el caso de Ingeniería en Recursos Hídricos. África siempre ha sido un tema pendiente en las relaciones internacionales de la Universidad y el camino que comenzamos a transitar recién comienza. Deseamos que esta cooperación pueda ampliarse a futuro, llegando a otras carreras”, expresó Julio Theiler, secretario de Relaciones Internacionales de la UNL, quien además destacó el apoyo recibido en este proyecto, tanto del gobierno angolano como del Fondo Argentino de Cooperación Horizontal (FO-AR).

Durante la charla, organizada por la FICH, Edson Fernando, Alceu Josias, Geraldo Quibelo, Abias Reis, Anselmo Lunguana y Antonio Van Dunem repasaron la historia de Angola, haciendo hincapié en el proceso de conquista de la paz, y mencionaron las características más relevantes del presente político y socioeconómico del país.

Larga lucha
Tras una caracterización geográfica de Angola, cuya población en 2014 ascendía a los 24 millones de habitantes, se presentó una síntesis de sus períodos colonial y pos colonial, en la cual se destacó la declaración de la independencia de la República Popular de Angola, en 1975, y la guerra civil posterior, originada por el enfrentamiento armado entre tres movimientos nacionalistas (MPLA, UNITA y FNLA) que habían luchado contra las fuerzas portuguesas.

Luego de 27 años de guerra civil, que en la década de 1990 envolvió a todo el país y tuvo como uno de sus focos a Kwito, capital de la provincia de Bié (sede de la ESPB), el 4 de abril de 2002 –tras la muerte en combate de Jonas Savmbi, líder histórico de UNITA– se firma el acuerdo de paz entre el gobierno del Movimiento de Liberación de Angola (MPLA) y la Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (UNITA).  “A partir de esa fecha, Angola alcanzó la paz definitiva. Esto abrió puertas hacia el crecimiento futuro en todos los niveles. Su economía, fuertemente basada en la explotación de petróleo y diamante, alcanzó tasas de crecimiento por encima de la media mundial. La circulación de personas entre las provincias, impensada durante la guerra, actualmente puede desarrollarse con absoluta normalidad. La educación también evolucionó con la creación de siete universidades”,  subrayó Antonio Van Dunem, uno de los jóvenes angolanos, quien también presentó las atracciones turísticas de dicho país africano.

En este contexto, el conocimiento de la hidrología del país como base para la construcción de obras de infraestructura hidráulica, constituye un elemento estratégico para la continuidad del crecimiento de Angola.