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Bajo el título “Territorios vulnerables: la acción pública en la gestión del riesgo” se realizó el jueves 31 de mayo, la primera mesa redonda de la segunda edición del ciclo de debates “Hacia un Desarrollo Sustentable” en la sala del Consejo Superior de la Universidad Nacional del Litoral (UNL).
El acto fue presidido por el decano de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas (FICH), Ing. Mario Schreider, y el secretario de Vinculación Tecnológica y Desarrollo Productivo de la UNL, Ing. Eduardo Matozzo y contó con la participación de autoridades universitarias, representantes de institutos de investigación científica, docentes, estudiantes y público en general.

Mesa redonda
La mesa estuvo integrada por el Mgr. Gerardo Huertas, director regional para Manejo de Desastres de la Sociedad Mundial para la Protección Animal (WSPA) de Costa Rica; el Dr. Alan Lavell, coordinador del Programa de Investigaciones sobre Riesgos y Desastres en la Secretaría General de la FLACSO; y el Dr. Armando Peraza, director del Centro de Gestión de Riesgos de La Habana, Cuba. El moderador de las disertaciones fue el Lic. Hugo Arrillaga, coordinador del Programa de Cooperación al Desarrollo y la Competitividad de la Secretaría de Vinculación Tecnológica y Desarrollo Productivo de la UNL.
Este ciclo es una iniciativa de la UNL a través de la Secretaría de Vinculación Tecnológica y Desarrollo Productivo y en esta oportunidad acompañaron a la organización del ciclo las Facultades de Ciencias Veterinarias (FCV), Ingeniería y Ciencias Hídricas (FICH) y Ciencias Jurídicas y Sociales (FCJS).
A los efectos de presentar la mesa redonda, el Ing. Eduardo Matozo sostuvo: “La idea de este debate es poder tratar sobre varios temas, desde distintas disciplinas y enfoques para poder llegar a construir entre todos, posibles soluciones que hagan que los problemas que aquejan a nuestro territorio se puedan ir encaminando hacia un desarrollo sustentable”.
Por su parte, el decano de la FICH manifestó: “Nuevas amenazas y los procesos asociados al cambio climático son elementos que deben ser tenidos adecuadamente en cuenta a la hora de formular escenarios para el análisis de la situación actual”. Y agregó: “La exposición física a eventos que pueden ser peligrosos, la fragilidad de determinados grupos sociales, la degradación ambiental y el desordenado crecimiento urbano no son más que manifestaciones de un problema de desarrollo que, sobre la base de una creciente inequidad social y la falta de sustentabilidad ambiental, ponen en serio riesgo el crecimiento sostenido y armónico de nuestras comunidades”.

La reducción del riesgo
Gerardo Huertas, representante de la WSPA de Costa Rica comenzó su disertación afirmando que “el ser humano es maquiavélico. El impacto de una guerra es mayor que el de un volcán o huracán, ya que tiene como objetivo a la población civil”.
A continuación, el disertante expuso algunos casos concretos de trabajo, como por ejemplo la ciudad de Reconquista, al norte de nuestra provincia y destacó: “Es ridículo que los seres humanos permitamos que los eventos de la naturaleza nos sigan dominando”.
Por su parte, el Dr. Armando Peraza detalló cómo funciona el Centro de Gestión para la reducción de riesgos de La Habana, Cuba. En este sentido, aseguró que allí trabajan con un esquema denominado “ciclo de reducción de desastres” que comienza con la preparación, seguida por la respuesta ante el desastre acontecido; luego viene la etapa de recuperación y, por último, la prevención ante futuras situaciones de desastre. De esta manera, este ciclo adquiere la forma de círculo, donde la última etapa retroalimenta a la primera.
Asimismo, el especialista de Cuba remarcó que en lo que respecta a la gestión de riesgos, “la punta de flecha está en la vulnerabilidad”, pero que ésta debe ser seguida por “la capacitación de la sociedad”. En este sentido, Peraza destacó el “importante grado de disciplina que hemos logrado en las evacuaciones. La gente se resiste a abandonar sus hogares, pero nosotros les ofrecemos alojamiento, así como el transporte no sólo de sus bienes, sino también de sus mascotas. También nos encargamos de brindarles la ayuda pertinente”.
A modo de cierre, el disertante definió la gestión del riesgo como un “proceso de toma de decisiones y planificación para conocer el entorno y prevenir futuros desastres”.

“El siglo del riesgo”
Por último, el Dr. Alan Lavell finalizó la mesa redonda asegurando que “si hoy en día la gestión del riesgo tiene importancia, ésta será mucho mayor en el futuro”. En este sentido, el especialista rescató a autores como Beck, Luhmann y Giddens, quienes desde el ámbito de las ciencias sociales, han dado en llamar a nuestro siglo “el siglo del riesgo”.
Lavell se refirió a la gestión del riesgo como “un proceso social donde el objetivo principal es la reducción de niveles de riesgo ya existentes y la prevención de riesgos futuros”.
Asimismo, el disertante remarcó la necesidad de “una transición del concepto de desastre al de riesgo”, ya que el primero es pensado como un producto, algo ya acaecido, mientras que el segundo apunta a la probabilidad de daños y pérdidas a futuro. “Es por esto que debemos poner el riesgo en el centro, reordenando nuestro pensamiento en torno a lo que implica. El riesgo es una construcción social, un producto de procesos fallidos de desarrollo”, finalizó Lavell.