85 Aniversario
Comenzaron los festejos en la Facultad de Ingeniería Química
Lunes 5 de julio de 2004
El 1 de julio se conmemoró el día del Ing. Químico con la disertación de un ex docente. En una emotiva charla el Ing. Cordiviola recordó su paso por la Facultad. Durante el año se prevén más actos por los 85 años de la unidad académica.
El 1 de julio se conmemoró el día del Ingeniero Químico y fue la fecha elegida por la Facultad de Ingeniería Química (FIQ) de la UNL para comenzar sus festejos por los 85 años de su creación. En la oportunidad, disertó un ex docente de la casa de altos estudios, Ing. Carlos Cordiviola, sobre "La Ingeniería Química como sentimiento".
Es importante destacar que el Día del Ingeniero Químico fue instituido el 1 de julio porque ese mismo día del año 1920 comenzaban los cursos de la carrera de Ingeniería Química en la UNL, primer facultad de esa disciplina en Latinoamérica creada en 1919.
La disertación de Cordiviola estuvo matizada con numerosas anécdotas de sus vivencias personales a lo largo de muchos años transcurridos en la Facultad, primero como alumno y luego como docente de Matemática y Termodinámica. Al final del discurso, el ex docente agradeció la colaboración de aquellos que fueron sus alumnos y confirmó sus sentimientos respecto a la Facultad y a la emoción que le generan estos festejos. "Falta poco para que se me salgan las lágrimas", afirmó Cordiviola. "Vivo con mucha emoción estos festejos Á‚"“continuóÁ‚"“ y mi gran agradecimiento es para la gente que está trabajando ahora en esta casa de estudios por haberme invitado".
Todos estos logros académicos no serían posibles sin el arduo trabajo diario de toda la gente que integra esta casa de altos estudios. "Por un lado es una responsabilidad y un orgullo ser decano de la facultad, sobre todo porque este es mi cuarto mandato. Pero esta unidad académica no sería posible sin su gente que trabaja día a día para llevarla adelante".
Es importante destacar que el Día del Ingeniero Químico fue instituido el 1 de julio porque ese mismo día del año 1920 comenzaban los cursos de la carrera de Ingeniería Química en la UNL, primer facultad de esa disciplina en Latinoamérica creada en 1919.
Una charla cargada de sentimientos
Bajo el título de "La Ingeniería Química como sentimiento", disertó el Ing. Carlos Cordiviola. En su discurso, el Cordiviola describió el desarrollo de esta profesión a nivel mundial y en la Argentina, siendo Santa Fe la cuna de la misma. También destacó las figuras de José Babini, a quien junto a los Dres. Horacio Damianovich, Josué Gollán y Gustavo Fester, consideró los cuatro pilares básicos sobre los que se constituyó la Facultad.La disertación de Cordiviola estuvo matizada con numerosas anécdotas de sus vivencias personales a lo largo de muchos años transcurridos en la Facultad, primero como alumno y luego como docente de Matemática y Termodinámica. Al final del discurso, el ex docente agradeció la colaboración de aquellos que fueron sus alumnos y confirmó sus sentimientos respecto a la Facultad y a la emoción que le generan estos festejos. "Falta poco para que se me salgan las lágrimas", afirmó Cordiviola. "Vivo con mucha emoción estos festejos Á‚"“continuóÁ‚"“ y mi gran agradecimiento es para la gente que está trabajando ahora en esta casa de estudios por haberme invitado".
85 años de arduo trabajo
Desde su creación en octubre de 1919, la Facultad de Ingeniería Química de la UNL viene formando profesionales en distintas disciplinas, tanto en carreras de grado como de posgrado, con una excelencia académica reconocida a nivel nacional e internacional. Y como afirma el Ing. Pedro Mancini, decano de la Facultad, este prestigio está demostrado en hechos. "Es una facultad que a fuerza de pelear, crece. Y esto lo demuestran sus desempeños académicos, tanto de grado como de posgrado, las altas acreditaciones que tienen las carreras, la cantidad de publicaciones que permanentemente se producen. Pero fundamentalmente sus servicios a la comunidad, tanto de rutina como de innovación tecnológica".Todos estos logros académicos no serían posibles sin el arduo trabajo diario de toda la gente que integra esta casa de altos estudios. "Por un lado es una responsabilidad y un orgullo ser decano de la facultad, sobre todo porque este es mi cuarto mandato. Pero esta unidad académica no sería posible sin su gente que trabaja día a día para llevarla adelante".